sábado, 6 de febrero de 2010

DINERO Y PRECIOS

MONEDA :

Dong vietnamita.

COMIDAS:

Presupuesto bajo: entre 1 y 2 dólares
Presupuesto medio: 2 dólares
Presupuesto alto: a partir de 40 dólares

ALOJAMIENTO:

Presupuesto bajo: entre 3 y 15 dólares
Presupuesto medio: entre 15 y 100 dólares
Presupuesto alto: a partir de 100 dólares

Los visitantes que elijan un hospedaje económico y pequeñas cafeterías para alimentarse podrán arreglárselas con 20 dólares diarios, a los que se debe añadir el transporte de larga distancia. Aquellos que prefieran alojarse en hoteles de categoría media, comer en restaurantes de precio moderado, coger taxis ocasionalmente y disfrutar de la vida nocturna, deberán contar con unos 65 dólares al día.

Hace unos años la mayoría de complejos hoteleros de prestigio insistían en que se abonara la factura en dólares estadounidenses pero en la actualidad (a excepción de la Vietnam Airlines), todos los negocios deben aceptar el pago en dongs. Muchos negocios mantienen sus precios en dólares americanos. Resulta aconsejable llevar cheques de viaje en dólares y algo de cambio en esta moneda.
Existen cuatro formas de canjear divisas: en un banco, en oficinas autorizadas, en las recepciones de los hoteles y en el mercado negro. Las mejores tasas las ofrecen los bancos, pero las agencias de cambio se encuentran, generalmente, en lugares más accesibles y cuentan con un horario más amplio. El índice en el mercado negro es menor que en el marco legal; si se ofrece un cambio más interesante que en las entidades bancarias, se está en peligro de ser timado. Las tarjetas de crédito Visa y MasterCard se aceptan en las ciudades más importantes y en las poblaciones más turísticas.

Es prácticamente imposible canjear moneda extranjera más allá de las grandes ciudades y las áreas turísticas. Los visitantes que se desvíen de las rutas más frecuentes, deberán llevar una cantidad suficiente de dongs, o considerar la necesidad de efectuar transacciones de cambio en el mercado negro. Se recomienda proveerse de una calculadora pequeña para las conversiones de moneda.
Los hoteles y restaurantes regentados por el gobierno, suelen añadir un 10% en concepto de servicio a las cuentas, por lo que no es necesario dejar propina. Son muy apreciadas las pequeñas gratificaciones en el resto de establecimientos de restauración. También resulta conveniente dar propina a conductores contratados y a guías, y se considera un buen gesto ofrecer una donación al finalizar la visita a una pagoda. El regateo es una práctica común, pero debe efectuarse con una sonrisa en los labios y como una forma de relación social, más que como un tema de vida o muerte.

DINERO

La moneda oficial en Vietnam es el dong, sin embargo, el dólar americano funciona, en la práctica, como una segunda moneda en todo el país.


Los cheques de viaje emitidos en dólares pueden ser cambiados en todos los bancos y son aceptados sin inconvenientes en hoteles y restaurantes, al igual que las tarjetas de crédito. Las que gozan de mayor aceptación son Visa y Master Card.

COMPRAS

La seda en blusas de señora y camisas para caballero es una de las compras que, casi con toda seguridad, se realizará en Vietnam. Los lacados, así como los muebles de caña y bambú, son excelentes y con preciosos diseños. La ciudad Ho Chi Minh es el mejor lugar para encontrarlos.

Los cascos verdes del ejército son muy utilizados en el norte pero difíciles de encontrar en el sur, hay que tenerlo en cuenta si se pretende comprar alguno de recuerdo.

Respecto a los recuerdos, en Ciudad Ho Chi Minh intentarán vender al turista encendedores zippo absolutamente falsos y que, según los vendedores, fueron utilizados por los soldados norteamericanos durante la guerra.

Desde hace poco tiempo funciona en Hanoi un mercado nocturno, donde se pueden adquirir piezas de artesanía, ropas, material de segunda mano, comidas y bebidas. Está situado en las calles adyacentes a Dong Xuan Market, justo al norte del lago Hoan Kiem, y abre desde las siete de la tarde hasta la medianoche.

SALUD

No es obligatorio ningún tipo de vacunación para viajar a Vietnam, pero por prudencia y experiencia, aconsejan tomar algunas precauciones mínimas antes de viajar a Vietnam.

Es conveniente, si se piensa visitar zonas selváticas, contemplar la posibilidad de seguir algún tratamiento profiláctico del paludismo, la fiebre amarilla, el tifus y la hepatitis A y B.

Debido a los casos registrados de 'gripe de la aves', el Ministerio español de Asuntos Exteriores recomienda vacunarse contra la Hepatitis A y B, Tétanos-polio, tifoidea y encefalitis. La malaria sólo afecta a determinadas zonas rurales.

Se debe incluir en el equipaje algún repelente de insectos con un contenido superior al 35% de DEET y procurar no mantener descubiertos los brazos y las piernas al amanecer y al atardecer, es decir, cuando los mosquitos están siempre más activos.

Hay que tener cuidado de no beber agua no embotellada ni ingerir verduras que no hayan sido previamente cocinadas. Si en algún momento del viaje a Vietnam se siente con la típica «diarrea del turista», convendrá tener a mano algún antidiarreico, del tipo Fortasec, e ingerir frecuentemente Suero oral, medicamentos que conviene tener la precaución adquirir antes de iniciar el viaje.

Los centros sanitarios son bastante deficientes en muchos casos. Las enfermedades más comunes son la fiebre tifoidea, el dengue y la diarrea común del viajero, debidas a la poca salubridad en alimentos y agua.

Para las urgencias de cierta gravedad se recomienda dirigirse a:

Hanoi el Hospital Francés (1 B Phuong Mai, tel. 04-574.07.40) y los ambulatorios para extranjeros Internacional SOS (31 Hai Ba Trung St., Tel. 934-0666) y Medical Family Practice (RM 109-112, A1 Van Phuc, Kim Ma Rd., Tel. 8430748.

Ciudad Ho Chi Minh el French-Vietnamese Hospital, LO MD5-1 Nam Saigon, F. Tan Phu, distrito 7, Tel. 08-411.33.33), y Cho Ray Hospital, (201B Nguyen Chi Thanh, F.12, Distrito 5, Tel. 08-855.41.37.

GASTRONOMÍA

La cocina vietnamita es, posiblemente, la mejor y la más variada de todo el sudeste asiático. En los restaurantes, los platos vienen ordenados según su ingrediente principal: de pollo, de pescado, etcétera. Los menús están siempre acompañados de arroz y tallarines además de una sopa (Pho) preparada a base de camarones, pescado y jengibre, a los que se añaden verduras, tallarines y carne.

La gastronomía varía mucho de una región a otra. La cocina vietnamita es como su cultura: refleja los numerosos contactos que ha tenido con otras culturas a lo largo de los siglos, entre las que cabe destacar la China, la jemer y la francesa.

El arroz (com en vietnamita) es el alimento básico de la dieta y la base de la agricultura del país. De hecho, el cambio experimentado por la producción de arroz refleja la evolución de la economía del país. A principios de la década de 1980 Vietnam dependía de la importación para alimentar a su pueblo; como resultado, había provincias enteras donde la gente pasaba hambre.


Hoy en día, ya sin granjas colectivas, Vietnam es el tercer exportador de arroz del mundo, a pesar del persistente temor a que el país se quede sin arroz, lo que con frecuencia lleva al gobierno a suspender las exportaciones e imponer cupos.

Los años de influencia y ocupación chinas son evidentes en el uso de palillos y la tendencia a comer arroz blanco a secas en lugar de mezclado con otros alimentos.

También son muy apreciados en la mesa vietnamita el tofu, las setas, las anguilas y los caracoles. Pero, sin duda, uno de sus mayores manjares es la serpiente, especialmente si se trata de la cobra. En primer lugar se degustará un delicioso sofrito con las entrañas del animal, y más tarde, un estofado con su carne en el que no escaseará el jengibre.

Existe una salsa de pescado llamada “nuoc mam” poco menos muy imprescindible en la cocina vietnamita. Esta salsa, que no falta en ninguna mesa vietnamita, igual que ocurre con la sal en los países vietnamitas o con la salsa de soja en China.

Los Tallarines: si hay un plato que defina Vietnam, es el pho, un simple caldo de tallarines de arroz con otros ingredientes al que se denomina «la amante de la cocina vietnamita».

En casa, los vietnamitas suelen comer arroz en las comidas como acompañamiento, tres veces al día. Pero cuando salen, suelen pedir pho. Los vietnamitas utilizan la comida como un eufemismo para referirse a sus relaciones. Cuando uno se cansa de arroz (la esposa o el esposo), come pho (el amante). Esta sopa de tallarines se suele tomar a la hora del desayuno o como tentempié por la noche, aunque muchas personas también toman pho a mediodía o para cenar.

ALGUNOS PLATOS TÍPICOS VIETNAMITAS:

El Banh Tet (pastel cilíndrico de arroz glutinoso) es un plato típico de la gente del sur de Vietnam, que se considera una ofrenda para rendir homenaje a los espíritus y los antepasados difuntos en ocasión del Tet, o los aniversarios de la muerte de los ancestros.

Gio (salchicha de carne magra de cerdo)

Cha (grasa mezclada en salchicha de cerdo magra) y cebolla en vinagre.

Che kho (un plato de frijoles verdes, azúcar blanca y sésamo) para ofrecer a los antepasados.


Banh xeo (panqueque de arroz relleno de camarones, carne y brotes de frijoles verdes).


Banh khot (pequeño panqueque vietnamita salado), uno de los deliciosos platos del sur de Vietnam, es receta favorita de visitantes nacionales y extranjeros. Está hecho principalmente de arroz y camarón fresco, y se sirve con salsa agridulce y vegetales.


My Quang (fideos Quang) es un alimento cotidiano de la población en la antigua región de Quang (actual ciudad de Da Nang y la provincia de Quang Nam, en el centro de Vietnam). Los fideos de Quang pueden tener muchos colores, como marrón rojizo, hechos de arroz sin pulir; amarillo por la mezcla con azafrán en polvo; o blanco, elaborados sólo con arroz ordinario.


Com (copos de arroz de color verde). El Com se prepara en diferentes platos deliciosos, como Com frito con azúcar, carne picada mezclada con Com y Xoi Com (Com al vapor).


Nam hai san (setas de mariscos).

PLAYAS Y COSTA

Vietnam es un precioso país de maravillosas playas, en las que la arena dorada o blanca, las aguas cristalinas y tranquilas, así como el entorno natural son parte importante de sus playas y denominador común se encuentre en la parte del litoral que se encuentre. El Golfo de Siam, el Océano Pacífico y el Mar de China son los tres mares que bañan al país y a sus playas.

Para disfrutar de unas vacaciones en Vietnam, en sus playas, debemos destacar que sus mejores playas se encuentran en el sur del país, en el Golfo de Siam, y que la mejor playa para disfrutar en esta zona de sus vacaciones es la que va de noviembre a junio. En esta época el clima es cálido, llueve poco, y la humedad no es tan alta con en verano.

En la localidad de Da Nang encontramos China Beach, una preciosa playa rodeada de calas y pequeños lugares aislados donde disfrutar de su arena blanca. El entorno es bastante natural, y cuenta con hoteles en su entorno. La Playa de Khe Mi también destaca por ser una playa tranquila donde disfrutar de nuestras vacaciones en Vietnam.


En la localidad de Nha Trang, una de las más turísticas del país, encontramos playas de arena muy blanca rodeadas de palmeras y vegetación. En este lugar se puede estar muy tranquilo, y por su posición geográfica, se puede visitar durante todo el año.


En Phan Thiet encontramos también playas como Mui Ne, playa que cuenta con abundantes dunas, y amplias extensiones de arena blanca. Es muy ventosa, ideal para deportes como el kitesurf y el windsurf. Esta playa, al igual que ocurre en Nha Trang, es idónea para visitar durante todo el año.

Otra de las playas destacadas de Vietnam se encuentra en el extremo sur del país, junto a la frontera con Camboya, se trata de la playa de Hon Chon, de arena blanca y un ambiente tranquilo. Por otro lado, la Playa Bai Tam, en la Isla Phu Quoc, es una de esas playas para los que adoran la naturaleza y quieren perderse en ella durante sus vacaciones.

Son muchas las playas de Vietnam que cuentan con hoteles con todo lo necesario junto al mar, junto a la playa, para que no se pierda ni un minuto de tiempo de las vacaciones en Vietnam.

CLIMA

El clima es subtropical en el Sur (la temperatura varía entre 27 y 35 °C) y tropical en el Norte (temperatura entre 20 y 28 °C). El mejor momento para visitar el norte del país es entre noviembre y finales de abril y principios de mayo (no se recomienda ir en julio-agosto, meses con fuertes precipitaciones). Lo mejor es visitar el centro del país entre febrero y marzo, ya que llueve mucho entre noviembre y finales de enero. El mejor momento para visitar el sur del país es entre diciembre y abril (días secos y soleados). Apenas llueve en febrero. Marzo y abril son los meses más calurosos. Por ejemplo, si se viaja a Hanoi (Norte), es preferible hacerlo entre Noviembre y Abril. Si se viaja a Ho Chi min (Sur), el mejor mes es Febrero y si se viaja a Da Nang (Centro), es mejor hacerlo en Febrero o Marzo. Y resumiendo, el mes ideal para viajar a cualquier parte del pais es Febrero.

ANÉCDOTAS

Hoy os contaremos algunas de las anécdotas que nos han sucedido a nosotros y a algunos de nuestros amigos. Por un lado y después de haberlas pasado, pueden parecer graciosas, pero si profundizamos en ellas y en el momento que sucedieron, fueron indignantes.

Vamos a contaros algunas de estas anécdotas y nos gustaría que nos diéseis vuestra opinión al respecto.

Para nosotros, y creo que coincidimos la mayoría, el tema mas duro es pasar por la entrevista con la psicóloga y la trabajadora social, sin pasar por esto no hay visita domiciliaria y como consecuencia no nos darían el Certificado de Idoneidad que es el documento mas importante.

Pensamos que todos cuando llega el día de la entrevista vamos como flanes, y para colmo cada psicóloga y cada trabajadora social son un mundo, como personas que son. Así que... depende con quién te toque, lo puedes llevar mejor o peor. Nosotros hemos tenido la entrevista en dos veces, un día con cada una, la trabajadora social era un cielo y nos pareció sensata y coherente, mientras que la psicóloga se le notaba que iba a "pillarnos", especialmente a mí, no me preguntéis el motivo, pero imagino que aunque no debieran, la figura de la madre será primordial, esto lo digo porque a otros amigos les pasó exactamente lo mismo.

Preguntas realizadas por la psicóloga a nuestros amigos:

A unos les preguntó si tenían thermomix, ¿os podéis imaginar la cara que se les quedó?, ¡¡es increíble!!, ¿como se puede hacer una pregunta tan chorra? ¿es que en nuestra época existía thermomix? ¿como han hecho nuestros padres?. Mi amiga indignada, le contestó: pues sí, la tenemos, pero que conste que la tenemos porque nos la han regalado, de lo contrario nunca la hubiéramos comprado. Y añadió, yo he estado a punto de ser madre biológica en tres ocasiones (ha tenido 3 abortos), y jamás nadie me preguntó si tenía thermomix, ¿o es necesario tenerla para criar a un hijo?. Evidentemente, muy psicóloga, pero no supo contestar y cambió de pregunta.

A otros les preguntaron cuántas veces mantenían relaciones sexuales a la semana, ¡alucinante!, a lo que esta le contestó.... No sé si Vd. cuenta las veces que mantiene relaciones sexuales con su marido a la semana, yo no las cuento, pero, eso sí, si Vd. quiere, me da tres mesecitos, las cuento y se lo traigo por escrito. Por supuesto, reinó el silencio en la sala y hubo... cambio de pregunta.

Otra pregunta muy curiosa fue la siguiente (esta puede dar lugar a debate): ¿Que crees que es  mas importante, lo que tú aportas al niño o lo que el niño te aporta a ti?. La respuesta parece clara, nada es mas importante, es decir, el niño nos aporta muchísimo y nosotros también le aportamos a él. Bien... pues no, la psicóloga enfadada, contesta: Vosotros al niño no le aportáis absolutamente nada, recordádlo, el niño es el único que os aporta todo a vosotros. Esta respuesta es frustrante e indignante, la hemos comentado mucho y hemos llegado a la conclusión que siempre la hacen y aunque nadie está de acuerdo con ellos, que sepáis que hay que contestar que lo que aporta el niño es lo mas importante ya que vosotros no le aportáis nada.

En fin... esto es un camino duro, pero estamos seguro de que merecerá la pena con creces y algún día nos reiremos de todo esto abrazados a nuestros hijos. Eso es lo que realmente merece la pena y por lo que se aguanta todo lo que se aguanta.

Paciencia y mucha fuerza a todos nuestros "compañeros de fatigas".